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Déficit de vitamina D: la paradoja española

España, pese a ser uno de los países europeos con mayor número de horas de sol, tiene una elevada prevalencia de déficit de vitamina D. A esto, se le conoce como la paradoja española y, en los últimos años, ha captado la atención de la comunidad médica.

¿Qué es la vitamina D?

La vitamina D es una pro-hormona que surge de la exposición solar del 7-dehidrocolesterol presente en las células de la piel. En el hígado, se transforma en 25(OH)D para después, en los riñones, convertirse en su forma activa: el calcitriol o 1,25(OH)2 D.

Elaboración propia

Su importancia sobre la salud radica en que la mayoría de órganos y sistemas de nuestro cuerpo contienen receptores para la vitamina D, lo cual quiere decir que ésta es esencial para el correcto funcionamiento de cada uno de ellos. Así, el déficit de vitamina D se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y cáncer, entre otros.

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Déficit de vitamina D

Hablamos de déficit de vitamina D cuando los niveles de 25(OH)D son inferiores a 30 ng/ml, existiendo una deficiencia grave cuando éstos caen por debajo de 10 ng/ml. Cuando los niveles se sitúan entre 20 y 30 ng/ml, se habla de insuficiencia y puede tratarse por medios no farmacológicos: exposición solar controlada y consumo de alimentos ricos en vitamina D (lácteos enteros, pescados grasos y huevo).

Dado que existen receptores de vitamina D a lo largo de todo el organismo, su déficit se ha relacionado con un sinfín de enfermedades:

  • Ansiedad, depresión, esquizofrenia y alzheimer.
  • Hipertensión arterial y enfermedad coronaria.
  • Asma.
  • Infecciones y enfermedades autoinmunes (diabetes mellitus tipo 1, artritis reumatoide y enfermedad de Crohn).
  • Osteoporosis.
  • Diabetes mellitus tipo 2 y síndrome metabólico.
  • Cáncer de mama, de próstata, de colon y de páncreas.

La paradoja española

España, pese a ser uno de los países de Europa con mayor exposición solar, siendo que el sol es esencial para asegurar adecuados niveles séricos de vitamina D, es uno de los países con mayor prevalencia de déficit de vitamina D (40% en niños y adultos y 80% en personas mayores de 65 años).

A continuación, te contamos las razones por las que España, pese a gozar de alrededor de 3000 horas de sol al año, tiene una prevalencia de déficit de vitamina D similar a la de los países del centro de Europa y mayor que la de Finlandia, Dinamarca, Suecia, Noruega e Islandia.

Escaso aporte dietético de vitamina D

La demonización actual de las grasas, ha hecho que en España haya caído el consumo de los alimentos más ricos en vitamina D: huevos, lácteos enteros y pescados grasos.

Altas temperaturas

En España, las altas temperaturas típicas de los meses de verano hacen que, durante estos días, nos resguardemos de la luz del sol. Esto es una auténtica desgracia para la vitamina D, pues los días estivales son los que mayor rayos UVB (los que necesitamos para sintetizar vitamina D) aportan.

De este modo, resguardarnos, aunque conlleva otros beneficios, supone perder la oportunidad de sintetizar vitamina D en todos los poros de nuestra piel. Nunca mejor dicho.

Protección solar

La excelencia de las campañas de concienciación sobre cáncer de piel en nuestro país ha hecho que gran parte de la población no salga de casa sin antes haberse aplicado su protector solar, al menos, en la cara. Sin embargo, lograr adecuados niveles de vitamina D supone exponer cara y manos al sol sin protección durante 10-15 minutos.

Baja exposición solar durante el invierno

Durante el invierno, las horas de sol son escasas y suelen coincidir con nuestra jornada de trabajo. A esto, se suma que la calidez típica de nuestro país, en comparación con el resto de países europeos, nos lleva a tener una menor tolerancia al frío y, por tanto, a resguardarnos y exponernos menos a la luz del sol durante estos meses.

Obesidad

En España, la tasa de sobrepeso-obesidad se sitúa alrededor del 60% y el tejido adiposo, la grasa, actúa como secuestrador de vitamina D al ser ésta liposoluble. Así, las personas con obesidad tienen mayor riesgo de presentar niveles séricos de vitamina D deficitarios.

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Situación por encima del paralelo N35

La situación geográfica de España, por encima del paralelo N35 (aquí, dado que es redonda, La Tierra se estrecha), hace que los rayos UVB no alcancen la península ibérica durante la mayor parte del año.

En los últimos años, la comunidad médica ha mostrado una gran preocupación al respecto. Así, dado que el déficit de vitamina D no causa síntomas específicos, se recomienda incluir la determinación de 25(OH)D en los análisis de sangre rutinarios de toda la población española, especialmente en personas que tomen glucocorticoides, padezcan problemas renales o hepáticos, tengan obesidad o presenten alteraciones en la absorción intestinal.

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